Gracias al cambio de paradigma a nivel laboral se ha extendido esta pandemia de nuevo siglo que se conoce como "titulitis" o el afán por la colección de títulos. La herencia del pensamiento de la revolución industrial se plasma en una premisa que se podría simplificar en "más estudios = economía más solvente". Ahora las reglas han cambiado y la sociedad ya no es mayoritariamente analfabeta sino que paradójicamente avanzamos hacía la sobrecualificación.
A día de hoy el conocimiento es fundamental pero no ha de caerse en el engaño de asemejar títulos con éxitos profesionales. La gente de letras somos constantemente bombardeados con cientos de eslóganes perturbadores que nos generan inseguridad tanto en nosotros mismos como en nuestra proyección laboral:
Ejemplo:
- Me llamo "Fulanito" y soy licenciado en Derecho/Filosofía/Historia/Traducción (cualquier carrera de letras) por la universidad de X.
Esta frase, si la repites en voz alta varias veces te darás cuenta de que cada vez te parece más insignificante. Vaya sí, es abogado pero y qué más. Sin embargo a un arquitecto nadie se le ocurriría preguntarle ¿y qué más? La sociedad española, al igual que ocurre en muchos países latinoamericanos ha menospreciado de forma sistemática el mundo de las letras, ensalzando a cumbres inmerecidas a informáticos y técnicos. Esta situación nos genera la ansiedad de buscar formación extra para encajar mejor en el sistema pero en muchas ocasiones desconocemos si nos abrirá alguna puerta. Incluso el efecto perverso de esta inseguridad nos puede llevar a pensar que por no tener formación de "posgrado" no merece la pena buscar trabajo.
Al acecho, esperando recoger los frutos de nuestros miedos laborales están miles de academias, colegios profesionales, universidades, etc., vendiendo todo tipo de cursos de formación "extra". Me parece inmoral el coste de muchos de estos cursos que por horas de clase y digo bien, pueden llegar a cobrar cientos de euros. Nadie duda que estos cursos sean interesantes, pero ¿realmente valen lo que cuestan o es una manera más de jugar con la desesperación de la gente?
Desde mi experiencia os digo que ningún curso te da lo que la práctica laboral te enseña. De nada sirve tener una nebulosa de conceptos y teorías en la cabeza si no ves como se aplican en la práctica. Por ello recomiendo que antes de que os pongáis a buscar cursos que supongan una inversión económica busquéis y ofrezcáis servicios de pasantías y prácticas en sitios serios y consecuentes. Quiero decir con esto último que no os conforméis con trabajar haciendo fotocopias gratis 8 horas al día pues eso no os ayudará en nada, por mucho renombre que tenga la entidad para la que colaboráis. Tenéis que sentir que, de algún modo, estáis adquiriendo nuevos conocimientos y experiencias.
La experiencia, igual que en la época romana se está imponiendo a los "títulos" en el nuevo paradigma laboral. No busques títulos por abultar el currículum, búscalos porque sirvan para afinar tu objetivo en la vida o por mero placer, no porque te lo impongan cánones rancios y pasados de moda. Y ante todo, pase lo que pase, no tengas miedo de abrirte al mercado laboral, no menosprecies tus habilidades y aprovecha al máximo cualquier ocasión útil de ampliar tu experiencia.
